sábado, 24 de octubre de 2015

Reconciliación productiva: el gran desafío del proceso de Paz

http://www.elespectador.com/opinion/reconciliacion-productiva-el-gran-desafio-del-proceso-d


A propósito de la inminente firma de la anhelada paz para Colombia, muchas preguntas surgen respecto del amenazador crecimiento del gasto público por cuenta de la reconciliación.


Seguido de ello y para cubrir el posible déficit fiscal, podría venirse un impuesto para la paz. En lugar de ello ¿Qué alternativas tenemos para evitarlo, o será que es inevitable? ¿Tenemos opciones innovadoras en ente asunto?
Aunado a estos cuestionamientos de caras a un perentorio déficit fiscal, la economía colombiana viene afrontando desafíos en múltiples aspectos. Una devaluación generalizada por cuenta de la dependencia de los hidrocarburos, una inflación creciente, una inversión extranjera cada vez más tipo golondrina y una innegable enfermedad holandesa, hacen que la situación actual del país en materia socio-económica, reclame soluciones de alto impacto. Para poder hacerlo, hay que insistir que el país tenga una planeación estratégica. Es por eso que el Estado debe comenzar a trabajar en los planes de largo plazo, los cuales deben ser perentorios para dar un salto importante en materia de competitividad de la producción nacional, que no sólo sería para exportación sino para el consumo interno.
Si hablamos de competitividad, Colombia se merece una infraestructura de clase mundial. No sólo con la construcción de carreteras de cuarta generación (4G), sino con una infraestructura que combine el transporte, de carga y de pasajeros, terrestre, marítimo, fluvial, férreo y aéreo. Para ello, son las alianzas público-privadas (APP) las que pueden dar respuesta a la anhelada multimodalidad. No obstante, son muchos los retos que afrontan las APP. El modelo de financiación, es uno de ellos. Es que la banca colombiana aún no está preparada para asumir financiaciones de proyectos de inversión, tan onerosos, como el que conlleva las APP. La pregunta es ¿son los bancos o es la regulación financiera en esta materia, la que podría estar poniendo en riesgo el avance de este tipo de inversiones? Una solución sugerida es agilizar la regulación en materia de financiación de las APP, y que ésta, no sólo dependa de créditos sino de exploración de alternativas como titularizaciones a través del mercado de capitales colombiano. Con esto, no sólo se dinamizaría este mercado, sino que se le daría una mano sobre todo en momentos de turbulencia por los que viene atravesando.
Por otro lado, el otro desafío es de dónde provendría la mano de obra que se necesita para la construcción de la infraestructura. El Estado tiene aquí una oportunidad única para incentivar, vía beneficios tributarios, a las empresas embebidas en las APP que impulsen programas de reclutamiento de los actores del conflicto armado. O ¿Sería ilógico pensar que gran parte de la mano de obra necesaria para la construcción de la infraestructura multimodal o de 4G la tendríamos con los reinsertados? Por supuesto, debe haber un plan de capacitación técnica y es aquí donde el SENA debe ser innovador.
Sin duda el gasto público se incrementará por cuenta de la reconciliación. La manera fácil de cubrir este gasto es con impuestos adicionales, pero ¿no sería mejor que antes que esto suceda, el Gobierno pueda apalancarse con inversiones directas en infraestructura y que el costo laboral lo asuman las APP? De esta manera no habría tanto incremento del gasto público. Al final de día estas empresas tendrán que necesitar mano de obra directa, la que provendría de los reinsertados.

lunes, 21 de septiembre de 2015

Valores compartidos: polo a tierra de las empresas

http://www.elespectador.com/opinion/valores-compartidos-polo-tierra-de-empresas
En momentos difíciles (turbulencia económica, incertidumbres políticas, inestabilidad jurídica, reformas tributarias, entre otros asuntos) es cuando más necesitamos a líderes transformacionales y que actúen como polo a tierra en el desarrollo de las estrategias empresariales.


Los buenos líderes, son aquellos que no se dejan permear por comentarios pesimistas o sesgados y también aceptan ser liderados.
En la búsqueda de la excelencia, los CEO o presidentes de compañías, han venido capacitándose. Para ello, no sólo lo hacen a través de lecturas de “best sellers” sino también yendo a las aulas, o mejor volviendo a ellas. Cada vez existen más programas para altos ejecutivos, no sólo en las universidades locales sino en las grandes universidades del mundo, con programas que aunque onerosos, tienen un contenido muy holístico. El desafío entonces para los CEO o los directivos que toman este tipo de programas, es que puedan replicarlo a sus empresas. De lo contrario esta inversión se puede ir al traste sino no se trasciende a las empresas con temas básicos como los valores empresariales y construcción de relaciones, tanto internas como externas, que se basen en hacer lo correcto y no en el beneficio de corto plazo.


El tema de discusión que me ocupa no es en sí la capacitación de los CEO, sino de qué tanto se replica en las empresas. Pero más allá de este tipo de inversiones, la solución disruptiva que necesitan las empresas hoy día es en la inversión en programas hechos a la medida y, que seguramente, no necesitan de una institución educativa o universidad. Se trata de hacer cumplir y hacer valer los valores empresariales. La primera pregunta es si las empresas cuentan con una estrategia y si dentro de ella han establecido, como brújula de la misma, los valores empresariales y el código de ética. De no tenerlo, los CEO deben ser los escuderos de la definición, junto con su junta directiva, de los valores, el código de ética, misión (mejor aún, su propósito) y visión, es decir para dónde va la empresa en una línea de tiempo. Por el contrario, si las compañías cuentan con esta brújula, el CEO debe no sólo divulgarlo sino hacerlos vivir y compartir.


En la medida que los colaboradores de las empresas vivan y compartan estos valores, se evitarán dolores de cabeza que con el tiempo podrían convertirse en migrañas empresariales. He escuchado mucho en el ámbito empresarial comentarios como: Esta compañía es muy buena y muy rentable, lástima este o estos empleados que hacen que sea una compañía odiada por la comunidad vinculada (Stakeholders). Estos últimos son los llamados empleados tóxicos, los que pueden tener posiciones de mandos medios o inclusos pueden ser vice-presidentes. Sin creerlo o sesgados muchas veces por sólo conocer la versión de este tipo de empleados, los CEO de estas compañías no toman las mejores decisiones, dejándose permear por comentarios que conducen a resultados de corto plazo, los que podrían ser rentables.


Para combatir este mal endémico, es necesario que las empresas y sus directivos hagan vivir los valores de las compañías y los motiven a compartirlos. Estoy convencido que si estos empleados tóxicos se contagian de las buenas prácticas seguramente pensarán más de dos veces en seguir haciendo las cosas a su modo, pues lo más seguro es que queden al descubierto, más temprano que tarde. Una empresa que siga alimentando malas prácticas empresariales, muchas de ellas alimentadas por estos empleados, está condenada al fracaso. El reto aquí no es sólo para las empresas, sino para los consumidores. Así que mucho cuidado con consumir productos o servicios de empresas con empleados tóxicos.

miércoles, 16 de septiembre de 2015

Colombia: lo que puede llegar a ser

http://www.elespectador.com/opinion/colombia-puede-llegar-ser
Con ocasión de una nueva crisis fronteriza y quizá una de las más graves por el tinte social; se han venido generando cortinas de humo que, si no se extinguen, le pueden costar retrasos estructurales a la sociedad colombiana.
Sin lugar a dudas, se debe afrontar esta crisis y con altura, pero no se pueden descuidar los frentes en los que realmente tenemos problemas estructurales.
La turbulencia política y económica de un país no puede interferir en sus planes de largo plazo. De lo que realmente debe ocuparse el Estado colombiano, con firmeza y determinación, es de ejecutar sus planes estructurales, es decir, los de mediano y largo plazo. El tema de discusión entonces es qué o cuáles son esos planes que el Estado debe impulsar, independientemente de cualquier crisis que se afronte en el corto plazo.
En columnas pasadas había mencionado algunos aspectos en los que la economía colombiana debería enfocarse, especialmente en dos de ellos: educación e infraestructura. Respecto del primero, la semana pasada tuvo lugar en Bogotá la segunda cumbre líderes por la educación. En esta cumbre se divulgaron, gracias a las iniciativas privadas y medios de comunicación, los desafíos de la educación en Colombia. La ambición del Gobierno es tener el país más educado de América Latina en 2025. Para ello ha dado el primer paso y es darle un presupuesto multimillonario, que por primera vez supera el militar. Pero no sólo basta con el presupuesto, deben buscarse alternativas y alianzas público-privadas (APP) en las que también participe la sociedad civil. Con esto se lograría ser incluyentes y veedores de la inversión de un presupuesto que seguramente atraerá como imán a los amigos de lo ajeno (públicos y privados).
Por otro lado, tenemos el desafío de la infraestructura. Si se logra construir una infraestructura digna, la producción nacional se fortalecerá y será mucho más competitiva, no sólo en la arena internacional de caras a las exportaciones, sino en la local para el consumo interno. Las APP serán la punta de lanza de este desafío. Lo que interesa ahora es que las obras de infraestructura inicien cuanto antes y se intercomuniquen. Para ello es necesario que no se piense en soluciones que conduzcan a la construcción de carreteras, sino también en el transporte multimodal, es decir, aquel que combine no sólo el transporte terrestre sino el fluvial, férreo y marítimo. Para ello se debe proponer, así como se hizo con la educación la semana pasada, una cumbre en la que se discuta y se acuerden los planes de largo plazo en el que se integren las soluciones que el país se merece.
Con una educación que promueva el emprendimiento y la innovación desde las edades tempranas, podremos impulsar a tener más empleadores que empleados. Lo más importante es que en las cátedras se enfatice en los valores de una sociedad en los que deben primar el objetivo común y no el individual.
Una vez tengamos más emprendedores e innovadores, tenemos que darle herramientas para que sean más competitivos y que puedan trascender fronteras. En tal sentido, se debe divulgar en cátedras las alternativas que tenemos para el comercio internacional a través de los crecientes tratados de libre comercio. Todo esto, para que no sea idílico, debe acompañarse de una infraestructura que minimice los costos de producción donde los más influyentes son los fletes. Es por esto que, si se desarrolla una infraestructura multimodal, seguramente redundará en la disminución de costos y apuntará a que seamos más competitivos. En pocas palabras, Colombia puede llegar a ser algo así como Chindia. Es decir, una mezcla de buenas prácticas chinas e indias. Por una lado, India, con su modelos de educación en la que sacó ventaja de sus profesionales con un gran número de doctorados y con ello se promovió la exportación de servicios profesionales; así como el impulso del emprendimiento e innovación. Por otro lado, China, con el impulso de la infraestructura que lo ha llevado a ser uno de los países más competitivos y uno de los principales lideres en producción en el mundo. Todo esto, por supuesto, guardando las proporciones y siendo innovadores de productos no convencionales para ponerles el sello de: Hecho en Colombia.

Innovación y Emprendimiento Inclusivo ¿Verdad inconveniente?


Innovación y Emprendimiento Inclusivo ¿Verdad inconveniente?


Muy a pesar de que el Estado se muestra parco frente al emprendimiento y a la innovación, recién se empieza promover, por parte de iniciativas privadas, el desarrollo de ideas innovadoras y de emprendimiento. La pregunta es ¿Qué tipo de emprendimiento y de innovación es lo que necesita Colombia?
Son muchos los desafíos que afronta el Estado colombiano en materia socio-económica. Una muestra de ello es la seguridad social, la cual cada día da muestra de un déficit en su cobertura producto de una población creciente y diversa. Esto último por cuenta de una comunidad inclusiva con las minorías. Es por eso que el Estado debe dejar de alimentar su mal endémico: El corto-placismo. En su defecto, debe empezar a afrontar las verdades inconvenientes propias de una economía, y más que ello, de una sociedad globalizada.
Para empezar a darle solución, el Estado debe propender por la generación de empresas productivas. No sólo productores de bienes sino también de servicios, pero aquellos no tan convencionales como los commodities, pues con la inestabilidad mundial de los precios de venta y de insumos, cualquier negocio tambalea. Es necesario entonces que exista una dedicación importante de tiempo a la investigación y desarrollo.
Para ello, es necesario que se fomente una cultura innovadora, la cual normalmente no se encuentra en soluciones no tan obvias. Para poder transformar la cultura colombiana en una innovadora, es necesario ser inclusivo. Si seguimos pensando que la investigación y desarrollo sólo están a cargo del Estado y de las universidades y éstas no fomentan o lo delega en la población, no se puede lograr una solución definitiva.
Para ello, la inclusividad en el emprendimiento debe abrirse paso. Por supuesto sería utópico pensar que se vuelque a la población a la investigación y desarrollo de productos de alta tecnología, cuando ni siquiera tenemos los recursos físicos y económicos para promoverla. Lo que si tenemos los colombianos es una gran creatividad. Esta creatividad se debe explorar más en comunidades minoritarias y que han sido discriminadas históricamente. Si todos los colombianos nos volcamos a promover el emprendimiento en el que se incluyan comunidades minoritarias, no sólo para que hagan parte de ideas de negocio, sino para que se focalicen en la generación de ideas que cubran las necesidades de consumos de esas mismas minorías.
En las empresas de consumo masivo, por ejemplo, se ha logrado ser inclusivo con sus productos. Es decir sus productos pueden ser consumidos por la humanidad sin diferencia de clase, género, orientación sexual, religión o sesgo político. Si eso lo hacen las compañías multinacionales, ¿Por qué no se fomenta la generación de ideas segmentadas para las minorías? De esta manera se puede generar un nuevo nicho de mercado y que seguramente puede generar soluciones hechas a la medida de las necesidades de las minorías.
Quizá el emprendimiento inclusivo sea una de las alternativas de solución para el fondeo de la seguridad social, no sólo en materia de pensiones de jubilación sino en salud, que es lo más urgente. Pero no sólo se puede hacer lo propio con las minorías, en su defecto el eventual post-conflicto, debe prestarse como caldo de cultivo para la generación de iniciativas de emprendimiento en donde se vinculen a la sociedad vulnerable y que ha sido parte del conflicto. Para ellos se necesita una estrategia de educación que promueva alternativas de emprendimiento. En este asunto quizá es donde tenemos todos, vulnerabilidad moral, la cual puede arruinar ideas innovadoras e inclusivas.

¿Nos preocupamos? No… ocupémonos. Muchas expectativas ha generado la turbulencia económica mundial.

http://www.elespectador.com/opinion/nos-preocupamos-no-ocupémonos
Por estos días, Colombia afronta una creciente y casi imparable inflación, una devaluación que apenas comienza y que podría generalizarse producto de su correlación con el precio del petróleo que aún no toca su piso. Es por eso que en la arena internacional estamos dando de qué hablar y no necesariamente de manera halagüeña. ¿Debemos preocuparnos?
En un caldo de cultivo se ha convertido la situación económica actual, en la que cada día afloran oráculos, chamanes y hasta magos que intentan predecir qué va a pasar con la economía mundial y con la colombiana. Me refiero a quienes invierten tiempo pensando, escribiendo y/o tertuliando sobre lo que va a pasar con el precio del petróleo, consecuentemente con la TRM por estar correlacionados (índice R^2 muy cercano a 1). Por otro lado, a mi juicio se está invirtiendo tiempo valioso en la revisión de las actuaciones pasadas, tanto políticas como económicas, donde sin duda el R^2 sí que es 1, pues no se puede desligar la economía de la política y viceversa. Las revisiones de las actuaciones de los gobiernos de turno en materia económica, la mayoría de las veces se convierten en críticas y no propiamente constructivas. Si bien la historia hace parte fundamental de cualquier análisis, hacer un uso excesivo de ello, significa gastar energía en lo que realmente debería ser importante. Por ejemplo, en materia de resultados financieros de las empresas, los resultados financieros son el principal insumo de las asunciones al momento de presupuestar. No obstante, cuando se hacen presupuestos o pronósticos, es necesario que se revisen en tiempo real la ejecución con el propósito de afinar y corregir las desviaciones, es decir que sea iterativo. Eso es lo que se conoce como presupuesto kayzen. Pero lo realmente importante de cualquier presupuesto es que si no hay ingresos o ventas, no hay proyección que valga. En palabras castizas, estamos embebidos, y sin darnos cuenta, en las críticas de las decisiones pasadas. Por otro lado estamos cayendo en la peligrosa arena movediza de la predicción de variables exógenas, que como sabemos no controlamos. En su defecto, la mejor manera de predecir el futuro es ocupándose del hoy y del ahora. La pregunta entonces en qué nos debemos ocupar hoy en Colombia.
En el campo empresarial, los directivos y sus colaboradores deben revisar su estrategia y si ella se soporta en un plan estructurado. Contar con una estrategia empresarial no garantiza el éxito y sostenibilidad de las empresas y sus colaboradores. Pero si la tienen establecida y divulgada, se minimizan los riesgos que atentan con logro de la misma. En el caso de los ciudadanos de a pie, debemos pensar y actuar de manera disruptiva, es decir debemos desafiarnos en materia de lo que hacemos hoy día por ser exitosos. Si somos empleados debemos retarnos por aportar nuestro potencial a las organizaciones a las cuales prestamos nuestro servicio, pero sobre todo hacerlo con mucha pasión. En el caso de los emprendedores, el reto es hacer lo que realmente los apasiona. Pero no basta sólo con eso, los emprendedores colombianos deben invertir tiempo en innovación de caras a potencializar su producción y hacerla más competitiva no sólo en la arena local sino de caras al comercio internacional. Es que debemos aprovechar las oportunidades en materia de comercio internacional como producto de los TLC que en la actualidad tenemos. De esta manera podremos hacer mayor peso en el lado positivo de nuestra balanza comercial que cada día nos jala al negativo. Ocupémonos entonces en lugar de estar preocupándonos.



Libertad económica en Colombia

http://www.portafolio.co/economia/indice-libertad-economica-heritage-2015-Colombia


La libertad económica es fundamental para generar el ambiente propicio para la creación de empresas y atraer inversión a los países. Colombia fue calificada por la Fundación Heritage y ocupó el puesto 28 a nivel mundial y es segundo en la región. ¿En qué falla el país?



Desde su creación en 1995, el Índice de Libertad Económica ha registrado ejemplos de cambios en política pública que han mejorado el progreso y aumentado la prosperidad.
Este índice mide 10 libertades económicas agrupadas en cuatro categorías las cuales se distribuyen de la siguiente manera:
-Estado de derecho: derechos de propiedad, libertad frente a la corrupción
-Tamaño del gobierno: libertad fiscal, gasto público
-Eficacia reguladora: libertad empresarial, libertad laboral, libertad monetaria
-Apertura de los mercados: libertad comercial, libertad de inversión, libertad financiera.
Para la edición de este año, la Fundación Heritage reportó que la libertad económica aumentó a nivel mundial por tercer año consecutivo, alcanzando un nivel récord de 60,4 puntos frente los 60,3 de 2014 y 59,6 unidades de 2013.
A pesar del progreso global registrado en 2015, el número de personas que viven sin libertad económica es perturbadoramente alto: 4.500 millones de personas que representan el 65 % de la población mundial.
UN MUNDO NO TAN ‘LIBRE’
Los promedios regionales muestran que América del Norte lidera la lista con un promedio de 73,9 puntos, seguida de Europa (67), Medio Oriente y África del norte (61,6), Centroamérica y Sudamérica (59,7), Asia-Pacífico (58,8) y África Subsahariana (54,9).
De las 178 economías evaluadas en el Índice 2015, solo cinco alcanzaron altos puntajes, es decir, de 80 puntos o más, lo que las sitúa en la posición de económicamente “libres”.
Estas economías ofrecen entornos institucionales en los que las personas y empresas privadas se benefician de al menos un grado moderado de libertad económica.
Hong Kong sigue manteniendo su estatus de ‘economía más libre’, una distinción que ha logrado durante 21 años seguidos. Le siguen Singapur, Nueva Zelanda, Australia y Suiza.
En la región comprendida por Centroamérica y Sudamérica, todos, salvo ocho países, recibieron un puntaje de libertad económica entre 50 y 70.
Según el Índice, “los cimientos para el buen funcionamiento de la democracia de libre mercado siguen siendo frágiles debido a la corrupción generalizada”. A lo anterior se suma la débil protección de los derechos de propiedad y deficiencias como la ineficacia reguladora y la inestabilidad monetaria.
COLOMBIA, EL SEGUNDO MÁS LIBRE DE LA REGIÓN
El puntaje obtenido por el país es de 71,7 y lo en el puesto 28 a nivel mundial, precedido por Noruega y por delante de Corea del Sur
Este resultado subió un punto más que el año pasado, con mejoras en seis libertades económicas.
La Fundación Heritage destaca que, en los últimos cinco años, la libertad económica de Colombia ha aumentado en 3,7 puntos debido a los “impresionantes logros en la apertura financiera y comercial”.
Así mismo, la economía nacional se ha beneficiado del buen desempeño del sector petrolero durante los años 2013 y 2014 y de la disminución de la amenaza de riesgo, debido a que el Gobierno busca una salida negociada al conflicto.
Aunque para algunos resulta indiscutible que en la última década el país experimentó cambios en materia económica y política, el senador Iván Duque sugirió que los resultados del índice deben estudiarse de manera desagregada para “medir el verdadero avance”.
En términos del estado de derecho, el país logró la siguiente puntuación: derechos de propiedad (50) y libertad frente a la corrupción (36).
Colombia mantiene el puesto 94 del ‘ranking’ de percepción de corrupción.
El Índice muestra que la corrupción se produce en varios niveles de la administración pública. Especialmente, el sistema judicial sigue reflejando bajos niveles de desempeño.
Frente a la libertad fiscal (76) y el gasto público (80,3), Colombia obtuvo buenos resultados que la sitúan superior frente al promedio de la región y del mundo.
El reporte revela que la carga impositiva total es equivalente al 16,1 % del ingreso nacional, mientras el gasto gubernamental ha venido reduciéndose hasta alcanzar el 28,3 % del total nacional.
Al respecto, Duque considera que la eficacia gubernamental es baja debido a un desbordante aumento del gasto público, además “la desigualdad en el país permanece constante como consecuencia de que una gran parte de la inversión pública es económicamente improductiva”.
Con respecto a la eficacia reguladora, el análisis del Índice muestra que el registro de una nueva empresa supone por lo menos 10 procedimientos. Además, los requisitos para obtener licencias pueden necesitar bastante tiempo.
Por otra parte, el país se destaca porque el costo no salarial de contratar a un trabajador es moderado y la regulación de las horas de trabajo es relativamente flexible.
Así mismo, las subvenciones estatales se mantienen por debajo de los promedios regionales.
La libertad empresarial se ubica en el nivel de 81,5 puntos, la libertad laboral es de 81,7 unidades y la libertad monetaria alcanzó una puntuación de 80,1.
A pesar de estos resultados, el senador Duque cree que dichas libertades no tienen un buen desempeño en el país.
“Los cuellos de botella que enfrentan los industriales desde los procedimientos para abrir una empresa como las condiciones para mantenerse en el mercado son limitadas, en especial para las pequeñas empresas”, explicó Duque.
También el mercado laboral presenta inflexibilidades “que encarecen el proceso de contratación y favorecen la informalidad”.
En lo que tiene que ver con la apertura de mercados el país obtuvo los siguientes resultados: libertad comercial (81,2), libertad de inversión (80) y libertad financiera (70).
Colombia, tras ser miembro de la Alianza del Pacífico junto a Chile, Costa Rica, Mèxico y Perú, ha mantenido tasas arancelarias óptimas para este acuerdo comercial.
No obstante, Duque cree que la estructura de los tratados comerciales vigentes con otros países pone “en una situación desventajosa al mercado interno.
Además, los inversionistas extranjeros y locales son tratados por igual ante la ley, lo que ha permitido que las líneas de crédito se adjudiquen en condiciones de mercado. Sin embargo, el acceso a la financiación a largo plazo puede resultar difícil.
¿LIBERTAD PARA HACER NEGOCIOS?
Para Felipe Jánica Vanegas, socio de la firma consultora EY, hacer negocios en el país depende del tamaño de la empresa o compañía que se establece.
“Si hablamos de inversión extranjera, es relativamente fácil. Por lo general las grandes corporaciones que invierten en el país y que generan empleo directo e indirectos, obtienen el acompañamiento del Estado”, indicó Jánica.
Pero si se ‘habla’ de emprendimiento, hacer negocios en Colombia resulta ser todo un desafío.
El acompañamiento del Estado en consultoría y motivaciones para creación de empresas es pobre y deficiente.
“En materia de compañías pequeñas que quieren empezar a exportar, la divulgación por parte del Gobierno es relativamente insuficiente en comparación con lo que se está haciendo en Perú”, comentó el consultor de EY a Portafolio.co.
Por su parte, Iván Duque señaló que la carga tributaria que soportan las empresas, en especial, las pequeñas y medianas, puede ser hasta de 100 % de sus utilidades.
“Los altos costos de energía, de transporte y logística, la dificultad para exportar e importar y la incertidumbre jurídica, además de encarecer el proceso productivo, dificultan la posibilidad de hacer negocios y de mantenerlos a través del tiempo”, finalizó Duque.

lunes, 24 de agosto de 2015

Clientes: Piedra angular en laestrategia empresarial

http://www.elespectador.com/opinion/clientes-piedra-angular-estrategia-empresarial


Con un entorno turbulento con ocasión del dólar caro a los que se le suman otros desafíos que presenta la economía colombiana, es necesario que los estrategas no pierdan de vista lo fundamental: Sus clientes.
Perder de vista, sólo por un instante, a los clientes puede costarle a las empresas el incumplimiento de las metas de ventas. Para el caso específico de compañías multinacionales que tienen operaciones de producción y comercialización en Colombia, las metas de ventas están denominadas en la moneda fuerte que utilizan sus casas matrices – comúnmente el dólar estadounidense–. Es por esto que se debe persuadir a las casas matrices en el cambio de las metas, no en volumen pero sí en moneda, en el caso colombiano: El peso. A parte de la capacidad de negociación con sus casas matrices, el desafío para los líderes de este tipo de compañías es hacer que no se pierda el centro de atención en lo realmente importante: Los clientes.


Para ello, antes de buscar soluciones paliativas en materia de devaluación, por ejemplo coberturas (naturales o contratadas con entidades financieras), los líderes de estas compañías deben iniciar un diálogo franco y conciso con sus casas matrices. Divulgar la situación actual con sus casas matrices, debe ser el objetivo en el corto plazo. Claramente debe iniciarse un proceso de negociación que conduzca a la generación de metas de crecimiento, pero basadas en moneda local. Esto es lo que las grandes multinacionales llaman: Verdades inconvenientes. El no afrontar estas conversaciones o posponerlas, pueden llevar al traste cualquier estrategia empresarial, donde quienes más aportan son los clientes. Darse golpes de pecho por el incumplimiento de metas a la casa matriz no es la solución, pues se malgasta energía, la que puede invertirse mejor en el mercado.


En el otro extremo están las compañías locales, que para su proceso productivo, tienen un alto componente de materias primas compradas en el mercado internacional. Estas compañías, sí deberían evaluar profundamente alternativas de cubrimiento. No obstante, esta situación no puede ser óbice para seguir invirtiendo en sus clientes. Por otro lado, las compañías locales con operaciones en el exterior, quizá la situación es más halagüeña. Pues tener ventas en el exterior denominadas en dólares, minimiza el impacto y cubre el riesgo de manera natural. El desafío aquí es lograr sacar ventaja en la mezcla de ventas (componente local versus el foráneo).


Cualquiera que sea el caso, el éxito de los estrategas viene dado por qué tanto tienen la capacidad de seguir enfocándose en los clientes. No obstante, resulta paradójico no analizar el entorno económico por el cual atraviesa nuestro país. Es que cuanto más se escucha y se analiza el entorno, más nervio se le imprime a las organizaciones. Por supuesto los estrategas no pueden dejar de lado las variables exógenas. Pero un análisis excesivo y desmesurado de la situación macroeconómica puede llevar a crasos errores. Uno de los más importantes es desenfocarse en los clientes.


Es por eso que poner a los clientes en el centro de las estrategias empresariales será crucial para el éxito, independientemente de la situación macroeconómica. La discusión se viene convirtiendo cada vez más tertuliana que solucionadora. Para transformar esta situación en resultados, se hace necesario que se piense más en la situación de entorno de los clientes que en la propia, pues con ello se matan dos pájaros de un sólo tiro. Si se quiere buscar soluciones al tema macroeconómico, se debe empezar por involucrar a los clientes en las discusiones y hacer que ellos sean parte de la solución.

lunes, 10 de agosto de 2015

Éxito empresarial ¿Planeación o suerte?

http://www.elespectador.com/opinion/exito-empresarial-planeacion-o-suerte


El éxito de los emprendedores y de las organizaciones depende de la suerte que tengan. Tanto en las organizaciones como en los emprendimientos, el éxito no es el resultado del azar. Quizá quienes se aferren a las probabilidades estadísticas, seguirán pensando que la suerte los acompañará en el negocio que emprendan. Lo cierto es que cuanto más duro trabajes más suerte tendrás.


La suerte es una consecuencia natural del trabajo duro y constante. En el caso de las organizaciones y de los emprendedores, ese trabajo duro depende de qué tan bien se defina y ejecute la estrategia de negocio. Estoy convencido que una planeación estratégica aumentará la probabilidad de éxito.
La pregunta que deben empezar a resolver los emprendedores y los líderes de las empresas colombianas es si cuentan con una estrategia de caras a la consecución de objetivos. Los que tienen claro cuál es la estrategia, deben empezar por divulgarla y consecuentemente, ejecutarla.
Pareciera sencilla la divulgación, pero en realidad es un desafío. Muchas veces el ego de los líderes les juega una mañana pasada, pues asumen que todos en la organización reman para el mismo lado y que todos los colaboradores son sus seguidores. Para saber si la estrategia está debidamente divulgada, bastaría con preguntar a cualquier colaborador si conocen la estrategia y de ser así, si la pueden explicar. De la calidad de la respuesta se podrá diagnosticar si las empresas realmente han divulgado o no la estrategia.


El siguiente paso es la ejecución. Es aquí donde el trabajo en equipo debe prevalecer sobre las individualidades. Para ello, se deben identificar a los líderes claves que coadyuvarán en la ejecución. Sin embargo, no sólo basta con tener a los mejores y más brillantes líderes dentro de las organizaciones. Muchos líderes empresariales han optado por contratar profesionales con aptitudes sobresalientes, incluso muy superiores a las del mercado o de la competencia. Otros, en contraste, optan por su intuición y en lugar de contratar líderes con muchas aptitudes, forman profesionales internamente y les ayudan a desarrollar las aptitudes necesarias para poner en marcha la estrategia. Es decir les interesa más la actitud que la aptitud. El mejor de los casos es cuando se logra el equilibrio perfecto entre estas dos cualidades.


Lo realmente importante es que el líder (emprendedor o presidente) sepa rodearse de buenos colaboradores. Para ello el líder debe saber identificar quiénes de sus colaboradores siguen la estrategia y quiénes la torpedean. Estos últimos son los llamados colaboradores o incluso líderes tóxicos. Normalmente éstos son los que critican en lugar de aportar o de contrastar con argumentos cualquier decisión del líder o líderes.


La recomendación para los empresarios y líderes es que definan la estrategia y la ejecuten. Seguido de ello deben saber elegir y monitorear a su gente. La identificación de los tóxicos es el reto de los líderes, pues se debe tener coraje para enfrentarlos y persuadirlos para ponerlos a bordo. Por supuesto, se debe empoderar a quienes realmente estén comprometidos con la organización. Para los tóxicos, la recomendación es que contrasten las ideas y se preparen bien para argumentar, de lo contrario no serán más que rebeldes sin causa y consecuentemente poca o nada suerte tendrán.

lunes, 3 de agosto de 2015

Bogotá ¿Capital o Clúster?



http://www.elespectador.com/opinion/bogota-capital-o-cluster


Criticar sobre lo que ha sido el manejo de la capital en materia de infraestructura es llover sobre lo mojado. Hacer algo diferente en esta materia es fundamental para el Estado y no para los gobiernos de turno.


Colombia tiene quizá uno el modelo más descentralizado de los países latinoamericanos. Pensaría incluso que puede ser uno de los más exitosos de la región en esta materia, pues Colombia no concentra el PIB en la Capital, por el contrario éste se distribuye en cinco regiones, a saber: 1. Centro 29,3%, 2. Antioquia y Eje Cafetero 13% 3. Occidente 9,4%, 4. Costa Caribe 7,9% (Sólo Barranquilla y Cartagena) y 5. Oriente 7,6% (Santanderes). Sumando estas cinco regiones se llega a la 67.2% (DANE de 2104). El resto del PIB se distribuye, inequitativamente en el resto de regiones.
Con estos datos se puede inferir que las oportunidades que aún tiene Bogotá son innumerables. Por ejemplo, podría llegar a ser un nodo logístico o clúster para el país. El no estar cerca de los puertos y estar a 2,600 metros sobre el nivel del mar, no debe ser óbice a las oportunidades que Bogotá podría brindar a sus vecinos y al resto del país. Si se logra concretar la inversión en infraestructura en el país, se debe pensar en la intercomunicación desde y hasta la Capital.


Con el impulso de la infraestructura que va a afrontar el país, Bogotá debe potencializarse como un nodo logístico y con ello se potencializaría la venta de servicios provistos por empresas colombianas o incluso atrayendo inversión extranjera. Para ello, la construcción de un sistema de transporte multimodal (férreo, aéreo y carretero) debe ser el caballo de batalla del Estado.


Son muchos los desafíos de la intermodalidad del transporte, no sólo para Bogotá sino para el resto del país. Es que la solución de la movilidad no es sólo para los bogotanos sino para la competitividad del país. Es por eso que cualquier solución propuesta debe venir aislada de planes políticos, pues éstos no sólo son sesgados sino miopes. La solución debe ser holística, por eso debe ser una política de Estado y que no dependa de la administración de turno local. Para ello, debe construirse un plan estratégico en el que Estado incluya a Bogotá como clúster capital y genere clústeres alternativos en ciudades intermedias, sobre todo en ciudades o poblaciones donde exista bajos índices de empleo.


Con un desarrollo de clústeres o de nodos logísticos, se logrará desarrollar económica y socialmente a las comunidades y lo más importante se brindará una calidad de vida que inspirará la generación de emprendimiento sostenible.


Por otro lado, la competitividad de las ciudades clúster coadyuvará en la optimización de los costos de los productos exportables. Pero no sólo se puede pensar en las exportaciones, pues el consumo interno debe mejorar y para ello, la producción nacional debe ser más competitiva con los productos importados. Esto se puede lograr con el desarrollo de una infraestructura de transporte intermodal en el que se desarrollen ciudades clústeres, donde Bogotá podrá ser llamada clúster capital.

lunes, 27 de julio de 2015

Alianza del Pacífico: ¿Ilusión u oportunidad?



http://www.elespectador.com/opinion/alianza-del-pacifico-ilusion-u-oportunidad


Relativamente poca importancia se le ha dado a la Alianza del Pacífico, siendo quizá uno de los principales acuerdos comerciales que ha firmado, no solamente Colombia, son Perú, Chile y México y del que miran de cerca Costa Rica y Panamá.


Es que los países de la alianza, suman una población de 212 millones de personas, un PIB medio per cápita de $13,000 dólares que en el agregado suma 1,9 billones de dólares y la tasa de desempleo de los cuatro países es del 7%.
Es por eso que esta alianza, no puede ser vista como una ilusión más. Para ello, el Estado debe generar la divulgación necesaria para que los emprendedores se enteren de lo que está pasando en materia de acuerdos comerciales. Si nos jactamos de tener una economía globalizada, el Estado debe propender porque los empresarios colombianos, de cualquier tamaño, busquen alternativas de crecimiento económico para sus empresas, lo cual redundará en un mejor retorno de inversión, donde uno de sus principales accionistas es el Estado.
Sobre qué tanto se sabe o se desconoce de los acuerdos comerciales internacionales actualmente vigentes, el Gobierno debería tener trazabilidad. No necesariamente por las estadísticas del DANE o de Proexport, sino de qué tanto se conoce en la ciudadanía de los mismos. Ese es el punto, pues la divulgación de acuerdos como éste ha sido tímida. Es por eso que el Estado debe dejar establecido los mecanismos de comunicación efectiva que permitan promover las ventajas que conlleva la firma de cualquier acuerdo. En palabras sencillas, se debe comunicar a los empresarios cuáles o qué productos o servicios podrían tener una ventaja competitiva en el mercado internacional como consecuencia de los tratados.
Una comunicación sencilla y franca en la que se “evangelice” debe iniciar de inmediato. No se debe esperar a las ruedas de negocio. Se necesita mejor preparación de nuestros empresarios, empezando por estar holísticamente informados. Los empresarios deben conocer, de primera mano, los pros y contras de las exportaciones de sus productos o servicios. Esa es la oportunidad que el Estado debe promover, pues si se “evangeliza” a los empresarios, seguramente podrán encontrar nuevas oportunidades para sus productos. También se fomenta un nuevo emprendimiento con innovación de productos o servicios y/o sustitutos.
Para poder lograr que la Alianza del Pacífico y otras alianzas o TLC se traduzcan en oportunidades y no en ilusiones, se debe pensar en al menos una divulgación clara y sencilla a los emprendedores. Esta comunicación debería tener en cuenta al menos, los siguientes puntos y de manera resumida: 1. Una comparación de mercados, competidores y de productos sujetos al acuerdo y de las regulaciones de cada nación, incluyendo lo tributario; 2.Estadística comparativa de productos o servicios, pormenorizada, que permita dar a conocer los pros y contras de su comercialización así como los incoterms propios de la comercialización internacional y 3. Información clara sobre financiación disponible incluyendo acceso al mercado de capitales locales.

lunes, 20 de julio de 2015

El secreto de ser un emprendedor exitoso y sostenible



http://www.elespectador.com/opinion/el-secreto-de-ser-un-emprendedor-exitoso-y-sostenible


La gran mayoría de los emprendedores que he conocido tienen un común denominador: La perseverancia que en algunos casos se transforma en resiliencia. No obstante, lo que realmente buscan los emprendedores de hoy en día es perseguir sus sueños. Muchos de ellos sin duda les motivan la riqueza, pero no necesariamente es esto lo esencial. Por ejemplo, el seguir transformando sus ideas en realidad y que éstas transformen a la comunidad es lo que realmente les inspira. En el evento del emprendedor del año que se celebra cada año en Mónaco y que organiza EY, se busca inspirar a estos emprendedores y se fomenta lo básico, que es seguir haciendo tangibles sus sueños y que no sólo sean una quimera.


En este evento, conocido como los olímpicos del emprendimiento, se premia no a los más ricos sino a los que más ayudan a construir un mundo mejor para trabajar. No obstante, la motivación que conlleva a que el evento se realice en Mónaco, es precisamente que se muestre al mundo entero que hay una nueva generación de emprendedores, que no necesariamente buscan riqueza, sino sostenibilidad. En contraste con los lujos y excesos es perfectamente argumentable que cuanto más riqueza se acumula mayores serán oportunidades de estancarse en la zona cómoda. La desafortunada zona cómoda para los emprendedores es aquella cuando se logra rentable y cuando no existen mayores motivaciones diferentes al de la caja registradora. Es por eso que el concepto de retorno de inversión para los emprendedores, administradores y dueños, incluyendo el Estado, es cada vez más miope. El verdadero concepto de retorno de inversión es el de sostenibilidad en el tiempo, es decir la visión periférica y no la de corto plazo.


¿Qué se necesita para tener una visión 2020 y no caer en el juego miope de la rentabilidad? No hay mejores respuestas o respuestas sugeridas, pero de lo que cada vez más hay que convencerse es que el propósito de las empresas, más allá de la misión y de los emprendedores o de sus CEO´s, es que éste realmente sea abrazado por cada uno de sus colaboradores o seguidores. Si esto no se logra conseguir, difícilmente se logra el propósito de la empresa. Por eso cuanto más claro se tenga el propósito de la empresa y que éste sea divulgado al interior y a sus interesados claves (stakeholders), mejor será la rentabilidad. Para ello, es necesario que los emprendedores y los CEO´s tengan una alta dosis de disciplina, pero sobre todo que tengan excesos, pero de humildad, pues cuanto mayores seguidores (no sólo en redes sociales) tengan mejores serán los resultados. La sostenibilidad vendrá por añadidura.

viernes, 3 de julio de 2015

Equidad e infraestructura, inseparables



http://www.portafolio.co/columnistas/equidad-e-infraestructura-inseparables


El crecimiento económico que ha afrontado Colombia durante la última década, evidencia el desarrollo y la madurez tanto del Estado como de sus ciudadanos. No obstante, se presentan grandes desafíos para el país. El Gobierno, a través del Departamento Nacional de Planeación, los ha traducido en tres pilares fundamentales, como los menciona en el Plan Nacional de Desarrollo 2014-2018: paz, equidad y educación.
En cuanto a la equidad, la exigencia inicial es buscar alternativas para explorar fuentes de crecimiento diferentes a la dependencia de bienes primarios de la economía (explotación de recursos naturales renovables y no renovables), específicamente aquellos bienes dependientes de la industria de hidrocarburos. Con el panorama actual de los precios internacionales del petróleo del primer y segundo trimestres del 2015 y la correlación existente entre este precio, y la tendencia de devaluación del peso frente al dólar estadounidense, es claro que se deben explorar otras alternativas de crecimiento que jalonen a la economía hacia un crecimiento sostenible y sin dependencia de los bienes primarios, como ocurre en la actualidad, buscando en los bienes secundarios, a través del desarrollo de la producción de la industria, la posibilidad de crecimiento económico.
Este desarrollo se podría potencializar en la medida en que avance la infraestructura del país, pues sin ello cada vez serán menos competitivos los productores nacionales, tanto para el ámbito local, destinado al consumo interno, como para los propósitos de exportación. El país reclama la interconexión, de manera eficaz y eficiente, de sus regiones. Para ello es necesario que se desarrolle, de forma sistemática, la infraestructura de transporte multimodal, es decir, que no solo sea terrestre, sino también que aproveche e interactúe con los medios marítimos, fluviales, aéreos y férreos.
Con la apertura de los mercados internacionales y la presencia de competidores internacionales, es un hecho que Colombia se ha vuelto atractiva para los inversionistas extranjeros que han desarrollado industria en el país, no solo como punto estratégico, sino para competir con productores nacionales y transnacionales con sede en nuestro territorio.
En respuesta a este panorama, se evidencia la necesidad de interconectar las regiones y hacer al país más competitivo. Es indispensable que se desarrolle la infraestructura de transporte multimodal, pues en la distribución interna los elevados costos de los productos generan un desafío importante en su valor, que difícilmente podrán estar a la altura de los precios de los competidores internacionales.
Por esto, en la medida en que el Estado acompañe a sus productores, en materia de infraestructura, más competitivos serán en el mercado local e internacional. Al final, el más beneficiado con este tipo de inversiones es el Estado mismo, pues cuántas más utilidades generen los productores, más dividendos reciben sus accionistas, y el más representativo es el mismo Estado.
Felipe Jánica Vanegas
Socio de Aseguramiento de EY Colombia

lunes, 8 de junio de 2015

Cuanto mejor la investigación de mercado mejor serán los resultados

http://www.pulzo.com/opinion/354611-cuanto-mejor-la-investigacion-de-mercado-mejor-seran-los-resultados
Aplicar técnicas de mercado no siempre arroja los mejores resultados en el mercado. Por más de que se utilicen modelos cuantitativos con combinaciones de variables exógenas y endógenas, los resultados no podrán ser mejores sino se acompañan de una alta dosis de conocimiento macroeconómico y lo más esencial de qué tanto se escuche a los consumidores.
Son muchos los métodos cuantitativos que se pueden poner en práctica para pronosticar resultados de ventas; sin embargo, si éstos no se le proporcionan los insumos adecuados, los resultados podrían ser desastrosos. Para poder ajustarse a los resultados esperados es necesario conocer el ambiente macroeconómico de los negocios. Por más que se pretenda ser especialistas en finanzas, mercado y contabilidad, no se pueden aislar las valoraciones de proyectos sino se acompaña de un robusto análisis macroeconómico del país en el que se está emprendiendo un negocio.
Una vez se logre consensuar el estudio macroeconómico, el siguiente paso es apasionarse por la idea de negocio y saber qué tanto el mercado está dispuesto a aceptarla como necesidad que transforme su estilo de vida. Para ello es necesario establecer el propósito de negocio más que la misión de la empresa que recién se crea.
Para ello es necesario escuchar el mercado y poder leer lo que podría decirle parara que consecuentemente se traduzca en ideas de negocio que perduren en el tiempo.Entonces ¿Qué se debe saber del mercado y cómo se aprende del mercado? Para poder responderlo es necesario saber hacer la pregunta correcta al mercado. Por ejemplo a través de encuestas a clientes, se podría conocer una tendencia de mercado y una necesidad no provista por el mercado, pero ¿qué tan adecuadas son las preguntas hechas a los consumidores?
Es allí dónde radica el asunto importante en realidad, pues cuanto mejor sea la pregunta, mejor será la respuesta a esa necesidad y mejor se podrá construir o crear la solución que el mercado ansía comprar.
Suena simple, pero en lo simple de las preguntas se encuentran los detalles del éxito de los emprendedores. No necesariamente una idea imaginada es la respuesta a lo que los consumidores realmente necesitan. Por eso, para ser un emprendedor exitoso es más que necesario que la ambición se acompañe de una alta dosis de sentido común, pues no es difícil pensar en la tele transportación, si no existe alguien que quiera experimentarla.

domingo, 7 de junio de 2015

Cuanto mejor se escuche el mercado, mejor resultado se obtiene y entonces ¿Cómo se escucha lo que el mercado quiere decirnos?


Cuanto mejor se escuche el mercado, mejor resultado se obtiene y entonces ¿Cómo se escucha lo que el mercado quiere decirnos?

Felipe Jánica Vanegas

Socio de EY

Cuanto mejor la investigación de mercado mejor serán los resultados. Aplicar técnicas de mercado no siempre arroja los mejores resultados en el mercado. Por más de que se utilicen modelos cuantitativos con combinaciones de variables exógenas y endógenas, los resultados no podrán ser mejores sino se acompañan de una alta dosis de conocimiento macroeconómico y lo más esencial de qué tanto se escuche a los consumidores.

Son muchos los métodos cuantitativos que se pueden poner en práctica para pronosticar resultados de ventas; sin embargo, si éstos no se le proporcionan los insumos adecuados, los resultados podrían ser desastrosos. Para poder ajustarse a los resultados esperados es necesario conocer el ambiente macroeconómico de los negocios. Por más que se pretenda ser especialistas en finanzas, mercado y contabilidad, no se pueden aislar las valoraciones de proyectos sino se acompaña de un robusto análisis macroeconómico del país en el que se está emprendiendo un negocio.

Una vez se logre consensuar el estudio macroeconómico, el siguiente paso es apasionarse por la idea de negocio y saber qué tanto el mercado está dispuesto a aceptarla como necesidad que transforme su estilo de vida. Para ello es necesario establecer el propósito de negocio más que la misión de la empresa que recién se crea. Para ello es necesario escuchar el mercado y poder leer lo que podría decirle parara que consecuentemente se traduzca en ideas de negocio que perduren en el tiempo.

Entonces ¿Qué se debe saber del mercado y cómo se aprende del mercado? Para poder responderlo es necesario saber hacer la pregunta correcta al mercado. Por ejemplo a través de encuestas a clientes, se podría conocer una tendencia de mercado y una necesidad no provista por el mercado, pero ¿qué tan adecuadas son las preguntas hechas a los consumidores? Es allí dónde radica el asunto importante en realidad, pues cuanto mejor sea la pregunta, mejor será la respuesta a esa necesidad y mejor se podrá construir o crear la solución que el mercado ansía comprar.

Suena simple, pero en lo simple de las preguntas se encuentran los detalles del éxito de los emprendedores. No necesariamente una idea imaginada es la respuesta a lo que los consumidores realmente necesitan. Por eso, para ser un emprendedor exitoso es más que necesario que la ambición se acompañe de una alta dosis de sentido común, pues no es difícil pensar en la tele transportación, si no existe alguien que quiera experimentarla.

¿Cómo se logra ser un emprendedor exitoso?


¿Cómo lograr ser un emprendedor exitoso?

Felipe Jánica Vanegas

Socio de EY

La humildad es fundamental para los emprendedores y para los líderes de las empresas. Lograr que sus dirigidos persigan el objetivo común o su propósito, es esencial para conquistar las metas y hacer que los sueños no sean una quimera.

No sólo en la válida de la fórmula uno que se corre en Monte Carlo se puede observar, de primera mano, los caballos de potencia que corren por sus angostas calles. En cada esquina de Montecarlo, y en Mónaco en general, se vive y se escucha el rugir de los motores de los más costos carros. Es que éstos parecen de juguetes y recién sacados de las vitrinas de los concesionarios de las más emblemáticas marcas de autos conocidas y por las que muchos suspiran. No sólo eso se puede observar en Mónaco, sino también una arquitectura que mezcla lo moderno con lo clásico. Aunado a ello, es impresionante ver el lujo no sólo sobre tierra sino también sobre el mediterráneo. Los yates que atracan en su marina, dan cuenta de la exuberancia de sus dueños. Cualquiera que llega a Mónaco - independientemente de su origen social, económico o religioso- se asombra con el exceso de lujo.

Qué mejor lugar de encuentro para inspirar a los mejores emprendedores del mundo y enseñarles que con su pasión y espíritu han logrado transformar sus sueños en realidad. Pero eso no es lo que realmente buscan los emprendedores de hoy en día. Más que buscar emular a los más ricos personajes del mundo, lo que buscan estos emprendedores es perseguir sus sueños. Muchos de ellos sin duda les motivan la riqueza, pero no necesariamente es esto lo esencial. Por ejemplo, el seguir transformando sus ideas en realidad y que éstas transformen la humanidad, es lo que realmente les inspira. En el evento del emprendedor del año que se celebra cada año y que organiza EY, se busca inspirar a estos emprendedores y se fomenta lo básico, que es seguir haciendo tangibles sus sueños y que no sólo sean una quimera.

En este evento, conocido como los olímpicos del emprendimiento, se premia no a los más ricos sino a los que más ayudan a construir un mundo mejor para trabajar. No obstante, la motivación que conlleva a que el evento se realice en Mónaco, es precisamente que se muestre al mundo entero que hay una nueva generación de emprendedores, que no necesariamente buscan rentabilidad sino sostenibilidad con el ecosistema. Por eso, en contraste con los lujos y excesos es perfectamente argumentable que cuanto más riqueza se acumula más oportunidades de estancarse en la zona cómoda existen. La zona cómoda para los emprendedores se logra cuando se es rentable y cuando no existen mayores motivaciones diferentes al de la caja registradora. Es por eso que el concepto de retorno de inversión para los accionistas, incluyendo el gobierno, es cada vez más miope. El verdadero concepto de retorno de inversión es el de sostenibilidad de la rentabilidad en el tiempo, no sólo en el corto, sino en el mediano y largo plazo.

Entonces ¿qué se necesita para tener una visión 2020 y no caer en el juego miope de la rentabilidad? No hay mejores respuestas o respuestas sugeridas, pero de lo que cada vez hay que convencerse es que el propósito de las empresas más allá de la misión y de los emprendedores o de sus CEO´s, es que éste realmente sea abrazada por cada uno de los empleados. Si esto no se logra conseguir, difícilmente se logra el propósito de la empresa. Es que cuanto más claro se tenga el propósito de la empresa y que éste sea perfectamente divulgado con los interesados claves de la empresa (empleados, dueños, reguladores, proveedores, clientes), mejor será la rentabilidad. Para ello, es necesario que los emprendedores y los CEO´s tengan una alta dosis de disciplina, pero sobre todo que tengan excesos, pero de humildad. Ese es el reto, por eso es paradójico pensar que con tanto exceso como los que se viven en Mónaco, se pueda inspirar a los emprendedores. Pero en efecto es inspirador saber que existe consenso entre los emprendedores  y CEO´s en actuar de manera de tal que su mensaje sea escuchado, pero lo más importante que sea comprado por los interesados claves de las empresas. La invitación para los emprendedores y CEO´s es tener muchos excesos, pero excesos de humildad, pues cuanto mayores seguidores tengan mejores serán los resultados.

miércoles, 3 de junio de 2015

Opinión sobre el estado del arte de niif en Colombia. Son niif en serio?

http://actualicese.com/actualidad/2015/06/03/no-aplicar-normas-internacionales-generara-todo-el-tiempo-planes-de-contingencia-para-las-empresas/

martes, 19 de mayo de 2015

Opiniones sobre implementación de NIIF en Colombia

Tomado de el Colombiano:


El modelo colombiano de reporte financiero por parte de las diferentes empresas ha venido convergiendo hacia las Normas Internacionales de Información Financiera (Niif), pero a juicio de los expertos, la tarea, está lejos aún de ser comparable con el modelo contable internacional.


El pasado primero de enero las grandes empresas (entidades bancarias, compañías de seguros y, en general, las firmas vigiladas por la Superintendencia Financiera y las compañías controladas, es decir las que tienen acciones o títulos de deuda negociados en la Bolsa de Valores de Colombia), debieron adaptarse y empezar a cumplir la normativa que empieza a reflejarse en los reportes del primer trimestre del año.
Cristóbal Uribe Castellanos, socio de la firma de contadores públicos Amézquita & Cía, explicó que en el caso de Ecopetrol, que el martes anterior reveló sus cifras, se pudo evidenciar alguna variación en la cuenta de propiedad, planta y equipo. “Esa propiedad tiene que ser valuada a valores comerciales, de mercado o de uso, y en eso hubo una gran diferencia”.
En efecto, mientras en el primer trimestre de 2014 el rubro de propiedad, planta y equipo de Ecopetrol llegó a 56,5 billones de pesos, en igual periodo de este año la cifra fue de 59,8 billones, es decir 3,3 billones de pesos más.
“La depreciación, en el futuro, podría aumentar o disminuir, lo que patrimonialmente tendrá unos impactos importantes para la compañía por los nuevos valores que anteriormente no se reconocían”, añadió el experto.
Sobre el eventual efecto de las Niif en el estado de ganancias o utilidades de las distintas sociedades, Uribe lo descartó. “En este momento no, es el primer balance o de apertura y tal vez haya algo más adelante”.
Una visión similar compartió Felipe Jánica Vanegas, socio de la firma de servicios profesionales EY Colombia, quien precisó que el impacto se notó en el patrimonio, “una cuenta que no es indicativa de la rentabilidad de la compañía”.
Para este analista, las Niif están basadas en valoraciones de activos “fair value” o el valor justo que las compañías pueden pagar por realizar sus activos y esto va en contravía de un costo base de la contabilidad colombiana, que es el costo histórico.
“El ejemplo clásico son los activos fijos que en el país tienen vidas útiles atadas a normas fiscales y esas normas difieren del “fair value”, porque pueda pasar que la utilidad sea más larga de lo que dictan las consideraciones fiscales. Así, mientras en la norma local hay un activo totalmente depreciado, por Niif este puede registrar algún valor”, aclaró Jánica.
Otro ejemplo, es la aparición de pasivos más altos de los que se contabilizaban con las anteriores disposiciones. “Allí podemos mencionar el caso de beneficios a los empleados, así un lustro que se le paga como bonificación al empleado, provoca que la empresa deba reconocer ese beneficio y llevarlo a la cuenta de pasivos, y eso antes no ocurría”.
En el caso de Ecopetrol ese aspecto no mostró una variación significativa, pues mientras en los tres primeros meses de 2014 la cuenta de provisiones no corrientes por beneficios a empleados llegó a 4,27 billones entre enero y marzo de este año se ubicó en 4,19 billones de pesos.
Además de las grandes firmas clasificadas en el Grupo 1, las personas naturales o jurídicas que cumplen ciertos criterios establecidos en el artículo 499 del Estatuto Tributario y las microempresas hacen parte del llamado Grupo 3, y este año también debió acoger y adaptarse a las Niif.
Cuello de botella
Los expertos de Amézquita & Cía sostuvieron que Colombia es tal vez de los últimos países latinoamericanos que inició un proceso de convergencia hacia los estándares internacionales de información financiera, pues ya la mayoría de países suramericanos, del área centroamericana y de El Caribe (excepto Cuba), vienen aplicando las Niif.
Vivian Amézquita, gerente de la firma de contadores, recordó que la composición societaria en Colombia está soportada en un 95 por ciento en las pequeñas y medianas empresas (pymes) o Grupo 2, que también debe adaptarse y tiene en este 2015 el año de transición para que en 2016 aplique, en pleno, la normatividad Niif. Pero, ¿están haciendo esa tarea los pequeños y medianos empresarios?
Néstor Jiménez Jaimes, consultor de Niif y socio de Grant Thornton, consideró que a las pymes “las cogió la noche” en la aplicación de esa normatividad y aseguró que gran parte de las sociedades del Grupo 2 ni siquiera han empezado el proyecto que debieron haber arrancado el año pasado con el diagnóstico y la preparación de las políticas contables.
“Están bastante atrasados, porque en este momento deberían hecho una implementación y elaborando los comparativos con respecto a lo que venían manejando. En junio y julio deben mandar reportes a la Superintendencia de Sociedades y el tiempo que queda es corto”, agregó.
Durante un taller organizado por la Cámara de Comercio del Aburrá Sur, dirigido a pequeños y medianos empresarios sobre el balance con estándares internacionales, Jiménez insistió en que “lo importante es que empiecen ya, que no esperen más tiempo para determinar cuáles son los efectos y los cambios más importantes que deben aplicar en la presentación de sus estados financieros a partir de 2016”.
En opinión del especialista, las cuentas más relevantes para el caso de las pymes, son las relacionadas con los inventarios (la asignación de los costos es diferente), la cuenta de propiedades, plantas y equipos (dado que es necesario establecer cuál es la vida útil de estos activos) y las cuentas de los contratos de arrendamiento (se debe establecer si cumplen ciertos requisitos para determinar si se deben incorporar a los estados financieros). “En estas tres cuentas está lo más grave y lo más relevante para las pymes”.
A su turno la presidenta Ejecutiva de la Cámara de Comercio del Aburrá Sur, Lillyam Mesa Arango, dijo que de las 30.000 empresas debidamente registradas en la Cámara, unas 3.500 son pymes, que deben cumplir con la aplicación con la adopción de las Niif.
“Se hace indispensable para el mercado poder manejar información financiera que cumpla con las características de comparabilidad, transparencia y confiabilidad para promover la competitividad de las empresas en el marco de la globalización”, indicó Mesa Arango.
Finalmente, Jánica advirtió que en Colombia la contabilidad no se modifica desde hace 25 años, con el Decreto 2649 de 1993 (reglamento general de contabilidad), mientras las Niif se pueden modificar, incluso, mensualmente.
“Así como la dinámica económica va cambiando, la dinámica del registro de esas transacciones tiene que ir cambiando y nos vamos a estar enfrentado a un nuevo hito en materia de reportes financieros y a un nuevo análisis por parte de los interesados claves de las empresas”, expresó.
Aunque las compañías grandes ya han dado el paso de ajuste a las Niif, los expertos reconocen que la labor no ha sido fácil porque se observa un cuello de botella en los sistemas de información, a los que tuvieron que adaptarse para llevar la contabilidad local y fiscal y cumplir la normatividad internacional. “Eso está complicando el trabajo para remitir la información como lo exigen las autoridades”, puntualizó Jánica.
Felipe Jánica Vanegas
Socio de Aseguramiento de EY Colombia
http://www.elcolombiano.com/negocios/empresas/pymes-estan-atrasadas-en-normas-financieras-HN1935382

domingo, 17 de mayo de 2015

Construyamos un mejor país para trabajar y vivir... Liberémonos de los regionalismos

Construyamos un mejor país para trabajar y vivir... Liberémonos de los regionalismos
Cuando investigo, leo y escribo acerca de lo que puede ser el territorio colombiano en materia de desarrollo económico y social, debo ser consciente, además congruente con lo que pienso digo y escribo, y es por eso quizá que poca importancia le doy a las remembranzas porque es eso lo que en realidad pasó y desafortunadamente ya no se puede cambiar.


No obstante, es inexorable que al recabar el pasado se evidencia que la realidad de desigualdad económica y social actual de nuestra querida patria, tiene sus génesis en las decisiones económicas que favorecieron a ciertos territorios nacionales, especialmente a la región Central y a Antioquia y el eje cafetero.


Debo ser congruente en mi pensamiento y es por eso que  seguiré pensando que ya nada puede hacerse con el pasado, pues Dios quiso que así fuera. Entonces, lo que hay que revisar de ese pasado es qué se pudo o qué debemos aprender para vivir un mejor presente. Y es eso lo que realmente es importante. No se puede estar viviendo de lo que pudo ser porque no se va a poder cambiar. Lo que sí podemos hacer es pensar en el presente y aprender de lo bueno, lo malo y lo feo que nos dio el pasado económico y social en Colombia. Un ejemplo de ello es la distribución desigual del gasto público. En eso hubo muchos pocos que se beneficiaron y una inmensa mayoría que les tocó pagar por cuenta de esos pocos.


En esta entrevista, tomada de El Heraldo,  que le hace a uno de los codirectores del Banco de la República (Banco Central de Colombia) se pone el dedo en la llaga sobre situaciones que marcaron un hito en materia de desigualdad y que gracias a ellos no se ha podido quebrar las barreras culturales, económicas y sociales del país del sagrado corazón. El caso del metro de Medellín que financió el Gobierno Nacional y que benefició a los medellinenses es uno de los ejemplos más representativos.


A mi gusto, las tendencias regionalistas - estúpidas por decirlo en palabras castizas- se han venido alimentando a lo largo de la historia colombiana. La ausencia de coraje para dirigir en el sector público y en casos aislados del sector privado, han sido caldo de cultivo para alimentar una tendencia social y económica que hoy día no hemos podido romper. No sólo en lo económico, pero en lo social y hasta en lo deportivo también se evidencia este tipo de comportamientos, pues la violencia en los estadios de fútbol colombianos se ha venido originando no sólo por las diferencias de estilos de juego sino también por las diferencias alimentadas por una sociedad que saca pecho de lo bien que se vive en sus regiones de origen y con esto lo que hacen es alimentar no sólo su diablo interior ( su ego) sino que también alimenta la ira de la contraparte, lo cual genera, en el mejor de los casos, insultos verbales y más adelante en riñas y hasta eventos mortales.


Pues no se trata de hablar del pasado ni mucho menos, pero sí es bueno revisarlo para mejorarlo y en algunos casos erradicarlo. Para vivir un mejor presente debemos darle ejemplo a las generaciones futuras quienes serán responsables del porvenir. Para ello, sigo convencido que debemos despojarnos del regionalismo salvaje colombiano. Si hay algo que he aprendido bien en la vida es del dicho "de esta agua no beberé" y de " el pez muere por la boca", pues hoy día vivo en Bogotá siendo un bogotano enamorado por una ciudad fantástica y que me ha dado a mis hijos, también trabajo con paisas, vallunos, costeños, llaneros, y santandereanos, tierra que me regaló a mi amada esposa. Además con la tendencia global de la economía colombiana, es más factible que nos identifiquen como colombianos por tener una miss universo que seguramente nadie en el exterior identifica como barranquillera, o es que la selección Colombia de fútbol es paisa o valluna? no es colombiana y así nos debemos comportar


Todo lo que debemos hacer es tener coraje para dirigir, ser entusiastas, enérgicos, trabajar con integridad, respecto y sobre todo trabajo en equipo, un equipo sin sesgo regionalista y sobre todo construyendo relaciones basadas en fundamentos de confianza y siempre haciendo el bien y sin mirar a quién. Definitivamente podemos construir un mejor mundo para trabajar, una mejor Colombia para vivir.


Entrevista del economista e historiador barranquillero Adolfo Meisel, co-director del Banco de la República
http://www.elheraldo.co/local/los-antioquenos-se-llevaban-la-mermelada-con-todo-y-frasco-195718
 

jueves, 7 de mayo de 2015

Llegó el momento de reportar en NIIF

http://www.apuertacerrada.com/empresarial/25676-llego-el-momento-de-reportar-en-niif.HTML


Luego de muchas interpretaciones técnicas y legales, las empresas en Colombia están casi listas para empezar a reportar su información financiera bajo estándares internacionales luego del mandato de la Ley 1314 de 2009 y de los decretos reglamentarios de la misma. Las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) han traído consigo muchos desafíos para las empresas en el país. Muchas de ellas han venido trabajando muy juiciosamente en esta materia, pero muchas otras han desestimado la convergencia a estos estándares internacionales.
Mucho ha pasado en los últimos años en materia de NIIF ( o IFRS por sus siglas en inglés) para el caso colombiano, pues aquella intención explícita de la Ley 1314 de 2009, ha venido teniendo interpretaciones por parte de los supervisores, Consejo Técnico de la Contaduría Pública, agremiaciones y de profesionales contables de la empresas obligadas a llevar su contabilidad en este lenguaje y que hoy día se le conoce en mejor como NIF en lugar de NIIF. Esto es algo que lógicamente iba a pasar, pues se han venido dando interpretaciones que no se alinean perfectamente con las NIIF, tal como las emite el IASB, quien es el máximo órgano que las promulga con sede en Londres. A cambio de ello, se han venido informando sobre la marcha y sin la divulgación suficiente, las fechas de presentación de información financiera y de tratamientos contables que, en algunos casos, no guardan relación con las NIIF tal como las emite el IASB.
Es por esto que el modelo colombiano de reporte financiero ha venido convergiendo a NIIF, pero está lejos aún de ser comparable con el modelo contable internacional. Esto se podría obviar si y sólo sí, se reforma de manera estructural el Código de Comercio y demás normas o leyes que tienen una injerencia manifiesta en la contabilidad. El día que se haga una agenda para recopilar las leyes, decretos y circulares que aludan el tema contable y que se deroguen y se reemplacen por normas contables, podríamos estar mucho más tranquilos ya que las interpretaciones legales dispuestas que hacen referencia a la contabilidad, dejarán de ser un problema para el reporte financiero y por supuesto para los tomadores de decisiones, interesados clave, supervisores, auditores y dueños.
Aunado a esto, ha venido proliferándose una nueva generación de “profesionales” mal llamados expertos en NIIF que desinforman a sus clientes y los hacen cometer errores significativos. La realidad es que en temas de NIIF no hay un experto único en el mundo entero. Los habrá en temas específicos de las NIIF, pero querer vanagloriarse o llamarse experto es más que atrevido, ya que hay que recordar que se necesita un conocimiento holístico en materia contable y que va más allá de la contabilidad. Pero es interesante ver cómo administradores, economistas, financieras, ingenieros y hasta abogados, se han venido especializando en NIIF, pero en el fondo no son expertos en contabilidad, pues esa no es su área de influencia.
Por otro lado, también es interesante ver a profesionales contables que sólo ven lo contable y no tienen una visión periférica de la transacción, pues es eso lo que realmente es importante. El mensaje que debo hacer inferir en mis lectores es entonces que este no es un trabajo de una persona o de un sólo profesional, cualquiera que sea su área de influencia, sino de un trabajo en equipo y un equipo realmente multidisciplinario donde el líder debe ser el Contador Público quien con su conocimiento contable profundo, logrará dirimir las interpretaciones de los demás coequiperos, que en muchas ocasiones se dejan llevar más por su ego que por lo que puedan aportar al equipo.
El proceso de convergencia debió ser más un proceso como lo denominó Supersociedades: de Construcción conjunta. No obstante, estamos lejos de ello, pues las agremiaciones o poco entienden de los temas de NIIF o no lo saben abordar en el cabildeo con los reguladores y supervisores. Por otro lado, las empresas han venido sufriendo del mismo mal de las agremiaciones, con el agravante de que se exponen ante el supervisor. Definitivamente las empresas ven cada vez con más lejanía la ayuda que se merecen. Aquí es donde existe una oportunidad de mejora de parte de las superintendencias de modo que le puedan brindar ayudas prácticas a las empresas y que éstas se traduzcan, inclusive en la revisión de las fechas de reporte.
La ausencia de divulgación a los interesados clave de la información financiera conocidos en el argot internacional como “stakeholders” (entidades o personas que toman decisiones con base en los resultados financieros que se reflejan en los estados financieros de las compañías) por un lado y por otro los “shareholders” (accionistas, socios o dueños simplemente) ha sido una de las causas raíces delas contingencias operativas y de reporte en las que se encuentran inmiscuidas las empresas en Colombia por esta época. Hay que decir también que aquellas empresas que no le dieron el nivel adecuado al proceso de convergencia, son quienes deben afrontar las contingencias mayores y sobretodo los administradores y las juntas directivas cuando menospreciaron el proceso o lo dejaron en manos de profesionales “expertos” en NIIF por ahorrar honorarios. ¿Fue buena la opción?
Por: Felipe Jánica Vanegas
Socio de Aseguramiento de EY Colombia
Líder de FAAS

jueves, 30 de abril de 2015

GDP Is a Bad Measure of Our Economy—Here’s a Better One
http://time.com/3826731/is-gdp-dead/?sf37726218=1