lunes, 27 de julio de 2015

Alianza del Pacífico: ¿Ilusión u oportunidad?



http://www.elespectador.com/opinion/alianza-del-pacifico-ilusion-u-oportunidad


Relativamente poca importancia se le ha dado a la Alianza del Pacífico, siendo quizá uno de los principales acuerdos comerciales que ha firmado, no solamente Colombia, son Perú, Chile y México y del que miran de cerca Costa Rica y Panamá.


Es que los países de la alianza, suman una población de 212 millones de personas, un PIB medio per cápita de $13,000 dólares que en el agregado suma 1,9 billones de dólares y la tasa de desempleo de los cuatro países es del 7%.
Es por eso que esta alianza, no puede ser vista como una ilusión más. Para ello, el Estado debe generar la divulgación necesaria para que los emprendedores se enteren de lo que está pasando en materia de acuerdos comerciales. Si nos jactamos de tener una economía globalizada, el Estado debe propender porque los empresarios colombianos, de cualquier tamaño, busquen alternativas de crecimiento económico para sus empresas, lo cual redundará en un mejor retorno de inversión, donde uno de sus principales accionistas es el Estado.
Sobre qué tanto se sabe o se desconoce de los acuerdos comerciales internacionales actualmente vigentes, el Gobierno debería tener trazabilidad. No necesariamente por las estadísticas del DANE o de Proexport, sino de qué tanto se conoce en la ciudadanía de los mismos. Ese es el punto, pues la divulgación de acuerdos como éste ha sido tímida. Es por eso que el Estado debe dejar establecido los mecanismos de comunicación efectiva que permitan promover las ventajas que conlleva la firma de cualquier acuerdo. En palabras sencillas, se debe comunicar a los empresarios cuáles o qué productos o servicios podrían tener una ventaja competitiva en el mercado internacional como consecuencia de los tratados.
Una comunicación sencilla y franca en la que se “evangelice” debe iniciar de inmediato. No se debe esperar a las ruedas de negocio. Se necesita mejor preparación de nuestros empresarios, empezando por estar holísticamente informados. Los empresarios deben conocer, de primera mano, los pros y contras de las exportaciones de sus productos o servicios. Esa es la oportunidad que el Estado debe promover, pues si se “evangeliza” a los empresarios, seguramente podrán encontrar nuevas oportunidades para sus productos. También se fomenta un nuevo emprendimiento con innovación de productos o servicios y/o sustitutos.
Para poder lograr que la Alianza del Pacífico y otras alianzas o TLC se traduzcan en oportunidades y no en ilusiones, se debe pensar en al menos una divulgación clara y sencilla a los emprendedores. Esta comunicación debería tener en cuenta al menos, los siguientes puntos y de manera resumida: 1. Una comparación de mercados, competidores y de productos sujetos al acuerdo y de las regulaciones de cada nación, incluyendo lo tributario; 2.Estadística comparativa de productos o servicios, pormenorizada, que permita dar a conocer los pros y contras de su comercialización así como los incoterms propios de la comercialización internacional y 3. Información clara sobre financiación disponible incluyendo acceso al mercado de capitales locales.

lunes, 20 de julio de 2015

El secreto de ser un emprendedor exitoso y sostenible



http://www.elespectador.com/opinion/el-secreto-de-ser-un-emprendedor-exitoso-y-sostenible


La gran mayoría de los emprendedores que he conocido tienen un común denominador: La perseverancia que en algunos casos se transforma en resiliencia. No obstante, lo que realmente buscan los emprendedores de hoy en día es perseguir sus sueños. Muchos de ellos sin duda les motivan la riqueza, pero no necesariamente es esto lo esencial. Por ejemplo, el seguir transformando sus ideas en realidad y que éstas transformen a la comunidad es lo que realmente les inspira. En el evento del emprendedor del año que se celebra cada año en Mónaco y que organiza EY, se busca inspirar a estos emprendedores y se fomenta lo básico, que es seguir haciendo tangibles sus sueños y que no sólo sean una quimera.


En este evento, conocido como los olímpicos del emprendimiento, se premia no a los más ricos sino a los que más ayudan a construir un mundo mejor para trabajar. No obstante, la motivación que conlleva a que el evento se realice en Mónaco, es precisamente que se muestre al mundo entero que hay una nueva generación de emprendedores, que no necesariamente buscan riqueza, sino sostenibilidad. En contraste con los lujos y excesos es perfectamente argumentable que cuanto más riqueza se acumula mayores serán oportunidades de estancarse en la zona cómoda. La desafortunada zona cómoda para los emprendedores es aquella cuando se logra rentable y cuando no existen mayores motivaciones diferentes al de la caja registradora. Es por eso que el concepto de retorno de inversión para los emprendedores, administradores y dueños, incluyendo el Estado, es cada vez más miope. El verdadero concepto de retorno de inversión es el de sostenibilidad en el tiempo, es decir la visión periférica y no la de corto plazo.


¿Qué se necesita para tener una visión 2020 y no caer en el juego miope de la rentabilidad? No hay mejores respuestas o respuestas sugeridas, pero de lo que cada vez más hay que convencerse es que el propósito de las empresas, más allá de la misión y de los emprendedores o de sus CEO´s, es que éste realmente sea abrazado por cada uno de sus colaboradores o seguidores. Si esto no se logra conseguir, difícilmente se logra el propósito de la empresa. Por eso cuanto más claro se tenga el propósito de la empresa y que éste sea divulgado al interior y a sus interesados claves (stakeholders), mejor será la rentabilidad. Para ello, es necesario que los emprendedores y los CEO´s tengan una alta dosis de disciplina, pero sobre todo que tengan excesos, pero de humildad, pues cuanto mayores seguidores (no sólo en redes sociales) tengan mejores serán los resultados. La sostenibilidad vendrá por añadidura.

viernes, 3 de julio de 2015

Equidad e infraestructura, inseparables



http://www.portafolio.co/columnistas/equidad-e-infraestructura-inseparables


El crecimiento económico que ha afrontado Colombia durante la última década, evidencia el desarrollo y la madurez tanto del Estado como de sus ciudadanos. No obstante, se presentan grandes desafíos para el país. El Gobierno, a través del Departamento Nacional de Planeación, los ha traducido en tres pilares fundamentales, como los menciona en el Plan Nacional de Desarrollo 2014-2018: paz, equidad y educación.
En cuanto a la equidad, la exigencia inicial es buscar alternativas para explorar fuentes de crecimiento diferentes a la dependencia de bienes primarios de la economía (explotación de recursos naturales renovables y no renovables), específicamente aquellos bienes dependientes de la industria de hidrocarburos. Con el panorama actual de los precios internacionales del petróleo del primer y segundo trimestres del 2015 y la correlación existente entre este precio, y la tendencia de devaluación del peso frente al dólar estadounidense, es claro que se deben explorar otras alternativas de crecimiento que jalonen a la economía hacia un crecimiento sostenible y sin dependencia de los bienes primarios, como ocurre en la actualidad, buscando en los bienes secundarios, a través del desarrollo de la producción de la industria, la posibilidad de crecimiento económico.
Este desarrollo se podría potencializar en la medida en que avance la infraestructura del país, pues sin ello cada vez serán menos competitivos los productores nacionales, tanto para el ámbito local, destinado al consumo interno, como para los propósitos de exportación. El país reclama la interconexión, de manera eficaz y eficiente, de sus regiones. Para ello es necesario que se desarrolle, de forma sistemática, la infraestructura de transporte multimodal, es decir, que no solo sea terrestre, sino también que aproveche e interactúe con los medios marítimos, fluviales, aéreos y férreos.
Con la apertura de los mercados internacionales y la presencia de competidores internacionales, es un hecho que Colombia se ha vuelto atractiva para los inversionistas extranjeros que han desarrollado industria en el país, no solo como punto estratégico, sino para competir con productores nacionales y transnacionales con sede en nuestro territorio.
En respuesta a este panorama, se evidencia la necesidad de interconectar las regiones y hacer al país más competitivo. Es indispensable que se desarrolle la infraestructura de transporte multimodal, pues en la distribución interna los elevados costos de los productos generan un desafío importante en su valor, que difícilmente podrán estar a la altura de los precios de los competidores internacionales.
Por esto, en la medida en que el Estado acompañe a sus productores, en materia de infraestructura, más competitivos serán en el mercado local e internacional. Al final, el más beneficiado con este tipo de inversiones es el Estado mismo, pues cuántas más utilidades generen los productores, más dividendos reciben sus accionistas, y el más representativo es el mismo Estado.
Felipe Jánica Vanegas
Socio de Aseguramiento de EY Colombia